Sobre nosotros

En el urdido  como en la vida, el tejedor tiene que ser un experto conocedor  y antes de comenzar, Don Roberto Puca ya sabrá cómo será su poncho, porque primero lo sueña. Conoce el recorrido que hará cada uno de  los hilos. En sus manos guarda la memoria de los antiguos para conducirlos y transformar la belleza de los materiales genuinos de esta tierra, en una de las piezas más preciadas que un sudamericano pueda tener: un poncho. Si es de vicuña mayor será el prestigio y la responsabilidad que asume el portador con los valores de nuestra cultura andina. Don Puca  nació en vísperas del Carnaval y llego  siendo un niño  para instalarse en Humahuaca.

Su maestro Don Abdon Castro Tolay lo recibió en Bella Esperanza, aprendió a sembrar y hacer pan. Peregrino  por el campo, visitando a las viejas familias  de tejedores en, Achicote, Coctaca, Rodero y así observando y aprendiendo como hacían las cosas los antiguos se convirtió en un maestro especializado en telares.